¿Se puede combatir la depresión otoñal?

¿Se puede combatir la depresión otoñal?

“Los psicólogos observamos cómo durante esta época del año nuestros pacientes acuden a consulta con un estado de ánimo más bajo de lo habitual, más cansados, más apáticos… y los pacientes que ya tenían un diagnostico de depresión, parece que se deprimen aún más”.

 

Con la llegada del otoño son cada vez más las personas que padecen depresión. Esta es una cuestión que todos, especialistas y resto de seres humanos de a pie, nos hemos preguntado alguna vez. Porque, o lo hemos padecido en nuestra propia piel o lo podemos observar en las personas de nuestro entorno. Los psicólogos observamos cómo durante esta época del año nuestros pacientes acuden a consulta con un estado de ánimo más bajo de lo habitual, más cansados, más apáticos… y los pacientes que ya tenían un diagnostico de depresión parece que se deprimen aún más.

 

Causas de los síntomas depresivos en otoño:

 

La depresión otoñal no es algo casual, hay razones para ello. También conocida como trastorno afectivo estacional (TAE), es un trastorno psicológico que se caracteriza por la manifestación de una serie de síntomas depresivos que aparecen conforme avanza el otoño:

 

  • Los síntomas más comunes son la tristeza, la desmotivación, la desgana, la apatía, el cansancio, los pensamientos negativos, la desconcentración, el insomnio o dificultad para conciliar el sueño, el mal carácter y peor humor, la reducción del deseo sexual, la reducción del rendimiento, etc.

 

  • El trastorno afectivo estacional no solo se considera un síndrome sino también un determinante del trastorno depresivo mayor (TDM). Los días largos, calurosos y soleados del verano comienzan a hacerse más cortos, lluviosos y fríos. Estos cambios ambientales afectan a nuestro organismo y pueden provocar la aparición de la conocida “depresión otoñal”.

 

Las causas de los síntomas depresivos en otoño pueden derivarse de las alteraciones hormonales que experimenta el organismo por la disminución de luz solar y los cambios climáticos. La disminución de horas de sol en otoño provoca que el cerebro libere menos cantidad de serotonina, sustancia involucrada en la regulación del estado de ánimo.

La melatonina también parece jugar un papel importante en el trastorno afectivo estacional, en cuyo caso se asocia con una alteración de los ritmos biológicos y reducción de la temperatura corporal, responsables de síntomas como el cansancio, la apatía, el insomnio y el aumento del apetito en alimentos ricos en grasas e hidratos de carbono. Así, las personas más sensibles a estos cambios pueden sufrir depresión, o agravar los síntomas del trastorno depresivo mayor.

 

 

¿Se puede prevenir la depresión otoñal?

 

La depresión otoñal es un trastorno pasajero que se sí puede prevenir. Para ello, es importante prestar más atención durante esta época a hábitos de vida saludables, como comer bien (a ser posible alimentos propios de esta época del año), un horario regular para el sueño, actividades al aire libre, practicar deportes, hacer yoga, meditar, pasar tiempo con los amigos, reírse mucho, etc.

Pero de manera concreta lo que contribuye directamente a reducir los síntomas, precisamente porque contribuye a aumentar los niveles de serotonina es prolongar la exposición al sol.  Aunque los días sean más cortos, es muy recomendable pasear, hacer tareas en horas de luz solar, practicar deporte al aire libre, tener contacto con la naturaleza… Como ya hemos dicho cuando la persona pasa mucho tiempo con poca luz solar se produce pérdida de energía y provoca que la persona se deprima.

Pues bien este tipo de depresión suele desaparecer con el paso de algunos días. Sin embargo, cuando los síntomas son intensos y perduran en el tiempo, afectando a las diferentes áreas de la vida de la persona (laboral, personal, familiar, etc.) se necesita terapia psicológica.

 

 

Y termino con un consejo muy útil

 

Y es que durante este periodo utilicen las gafas de sol el menor tiempo posible.

 

Lidia Varela